Salvador Dalí: ¡Pintaba hasta los coches!

Descubre el trabajo en el mundo de la personalización de vehículos del genial Dalí.

Salvador Dalí fue un artista español que dejó una huella indeleble en el mundo del arte. Sin embargo, lo que quizás muchos no sepan es que también tuvo un gran interés en la personalización de automóviles, creando diseños únicos y extravagantes que a menudo desafiaban las convenciones del mundo del motor.

El interés de Dalí por la personalización de automóviles comenzó en la década de 1930, cuando colaboró con su amigo y mecánico, Luis Vidal, en la personalización de un Rolls-Royce Phantom III. El diseño, que incluía una serie de elementos surrealistas, como una trompeta de elefante que se extiende desde el capó, fue recibido con cierta incredulidad por los expertos del mundo del motor. Sin embargo, Dalí no se dejó disuadir y continuó experimentando con el diseño de automóviles.

Uno de los primeros proyectos de personalización de automóviles en los que Dalí participó fue en 1937, cuando fue invitado a diseñar un modelo de automóvil para la marca italiana Cisitalia. El resultado fue el Cisitalia 202 GT, un vehículo que combinaba el estilo futurista y aerodinámico con la elegancia clásica italiana. Dalí contribuyó a la personalización del automóvil con su característico estilo surrealista, creando una pintura de la Virgen María en el capó del vehículo y añadiendo otros detalles extravagantes.

En 1952, Dalí se asoció con el ingeniero y diseñador estadounidense, Robert E. Petersen, para crear el Dalí-Petersen Avant-garde. Este vehículo, que se describió como "un coche con un corazón humano", presentaba una serie de características inusuales, como un motor situado en la parte trasera y una carrocería que se podía cambiar para adaptarse a diferentes situaciones de conducción. El diseño también incluía una serie de elementos surrealistas, como puertas con forma de mariposa y un interior forrado de terciopelo rosa.

Otro proyecto de personalización de automóviles en el que Dalí participó fue en 1958, cuando fue contratado por el productor de cine británico David O. Selznick para personalizar un Rolls-Royce Silver Cloud II para su esposa, Jennifer Jones. Dalí creó un diseño que incluía una pintura de Jones como Juana de Arco en el capó del vehículo, así como detalles decorativos y una serie de complementos exclusivos, como espejos y asientos personalizados.

Pero quizás uno de los proyectos más impresionantes en los que Dalí participó fue en la personalización del automóvil del famoso cantante y actor Elvis Presley en 1962.

Presley encargó a Dalí que personalizara su Cadillac Eldorado para que se convirtiera en un vehículo único y extravagante. Dalí creó un diseño que incluía una serie de detalles surrealistas, como una pintura de la Estatua de la Libertad en el capó del vehículo y una serie de elementos decorativos en el interior, como alfombras de pelo de oso polar. 

Pero la personalización de coches no era simplemente una actividad creativa para Dalí. También creía que los coches reflejaban la personalidad y el carácter de sus propietarios. En una entrevista en 1969, Dalí declaró: "Creo que un coche es una extensión de uno mismo. El coche que uno elige dice mucho sobre su personalidad y sus gustos estéticos".

Pero la relación entre Salvador Dalí y la personalización de automóviles no se limitó a proyectos puntuales. Dalí también fue un gran aficionado al mundo del automovilismo y llegó a personalizar su propio vehículo, un Jaguar E-Type. Dalí diseñó un modelo que incluía un sistema de escape personalizado, detalles decorativos en el exterior y en el interior, y un sistema de audio de alta calidad.

En 1972, la marca de automóviles española SEAT encargó a Dalí que creara una serie de diseños para sus modelos 600 y 850. Los diseños incluían una serie de complementos y accesorios surrealistas, como un espejo con forma de mano, una antena de radio en forma de antena de insecto y una palanca de cambios en forma de un hueso gigante.

Además de su propia participación en la personalización de automóviles, Salvador Dalí también inspiró a otros artistas y diseñadores con su estilo surrealista y extravagante. El diseñador industrial italiano Piero Fornasetti creó un conjunto de complementos y accesorios para automóviles que incluían detalles surrealistas inspirados en la obra de Dalí, como relojes de pulsera gigantes y marcos de cuadros